Un abogado presentó la denuncia en la que acusa al titular del INM en Chihuahua de que ordenó no abrir la celda cuando inició el incendio.
La denuncia la presentó ante la Fiscalía General de la República.
Asegura el litigante que Salvador González Guerrero emitió la orden vía telefónica.
A raíz de ese incendio, 39 personas hasta ahora perdieron la vida.
La denuncia la presentó el abogado Jorge Vázquez Campbell en representación de clientes a los que no quiso identificar para proteger la seguridad de sus defendidos.
Las autoridades mexicanas anunciaron que ocho trabajadores del centro de detención de migrantes están bajo investigación. Se sabe que tres de ellos son funcionarios.
También se afirmó que se preparaban varias órdenes de aprehensión. Una de dichas órdenes sería para el migrante que presuntamente inició el incendio en señal de protesta.
Un video mostró a guardias saliendo de una sala con humo sin ningún intento de liberar a los migrantes que estaban detenidos.
Habría sido vía telefónica
Según la denuncia del abogado, el contraalmirante en retiro Salvador González Guerrero, “dio la orden por llamada telefónica para que a las personas migrantes que se encontraban alojadas dentro del lugar en donde inició el fuego no les abrieran la puerta por ningún motivo”. González Guerrero es el titular del Instituto Nacional de Migración en Chihuahua.
La fiscal que lleva el caso, Sara Irene Herrerías, indicó que los ocho trabajadores investigados ya se habían presentado a declarar. Sin embargo, el jefe del INM en la entidad no había rendido declaración.
Cinco de los investigados son guardias de seguridad privada, pero también hay dos agentes federales de Migración y un funcionario del estado.
De acuerdo con el abogado Vázquez Campbell, sus clientes indicaron que uno de los migrantes “pidió que le diera un cigarro y un encendedor y empezaron a hacer su protesta”.
Puntualizó el abogado que eran cinco personas quienes protestaban. Ellas habían sido detenidas ese mismo día.
Luego dice que de acuerdo a sus clientes: “Los oficiales se burlaron de ellos, se irritaron y dos de ellos le prendieron el fuego a un colchón”.
Fue entonces cuando, según el abogado, los agentes migratorios avisaron a González Guerrero “y el señor dijo que no se hiciera nada y que por ningún concepto los dejaran salir”.
Fuente: Agencias