Los acuerdos políticos de la 4T con la familia Yunes de Veracruz volvió a generar tensiones al interior de Morena. Este martes, la gobernadora del estado, Rocío Nahle, le exigió a la comisión de honestidad y justicia del partido que rechace la afiliación que emprendió el expanista Miguel Ángel Yunes Márquez y amenazó con presentar pruebas en su contra por «lavado de dinero y otros delitos».
Este martes, la tensión comenzó desde temprano, una vez que la dirigencia nacional de Morena llegó a la Cámara alta, donde emprendió la afiliación de las figuras que tienen un asiento en el Senado. En un primer momento, se difundió una foto con todos los senadores y senadores del partido entre los que estaba Miguel Ángel Yunes Márquez. A pesar de que se intentó aclarar que no se había afiliado, el presidente del Senado, Gerardo Fernández Noroña, reveló el inicio de su trámite a través de las redes sociales.
Sin embargo, minutos después la tensión volvió a aparecer en la cúpula de Morena. La gobernadora de Veracruz y adversaria pública de toda la familia Yunes le exigió a la comisión de honestidad y justicia del partido que rechazara la afiliación del Senador por «no representar ni contar con los postulados del movimiento de regeneración».
Asimismo, adelantó que le enviará su solicitud a la presidenta, Luisa María Alcalde, junto a una «carpeta azul» con pruebas en su contra por «lavado de dinero y otros delitos». «¡Los militantes merecen respeto!», declaró.
Con este escenario, la alianza que Morena hizo con la familia Yunes para aprobar la reforma judicial en el Senado el año pasado vuelve a generar fuertes tensiones al interior del partido guinda. En aquel momento, como relató LPO, la propia gobernadora había rechazado la llegada de la entonces familia panista a la 4T. «Nos reservamos el derecho de admisión», había dicho y este martes lo reiteró.
En el mismo sentido se expresó la diputada federal Rosa María Hernández Espejo, quien exigió que se rechace su afiliación «por congruencia con los principios y en respeto al pueblo».
El escenario no es claro para Morena porque los Yunes se acercaron al partido durante el debate por la reforma judicial, que finalmente se aprobó por el voto afirmativo de Miguel Ángel Yunes Márquez, lo que le valió su expulsión del PAN.
Desde entonces, el clan cuenta con el apoyo de importantes figuras de la 4T, como el propio Noroña o el coordinador del partido guinda en el Senado, Adán Augusto. Sin embargo, los principales liderazgos del estado y las bases oficialistas lo rechazan a partir de su oscuro pasado en el que estuvo involucrado en diversas causas judiciales.
Además, todavía es una incógnita el rol que tendrá la familia Yunes en las elecciones municipales de junio. Como relató LPO, algunos sectores de Morena creen que les podrían quitar Veracruz Puerto al prohibir que compitan familiares directos de las actuales figuras ejecutivas, como sería el caso de dicha ciudad donde gobierna la esposa del senador, Patricia Lobeira Rodríguez. Sin embargo, este escenario revive la tensión y no permite esclarecer el armado electoral para los próximos comicios.
Fuente: Grupo Es Noticia