El pasado lunes, la secundaria «José Santos Valdez», ubicada en la capital de Durango, se vio envuelta en controversia tras la destrucción e incineración de objetos decomisados a sus estudiantes, entre ellos, al menos cinco teléfonos celulares. La medida, avalada por la directora del plantel, Hilda Patricia Ortega, ha generado indignación entre los padres de familia y autoridades locales.
De acuerdo con los reportes, algunos estudiantes fueron obligados a presenciar la quema de sus pertenencias como parte de una medida disciplinaria. Carlos Ramírez, presidente de la Asociación de Padres de Familia en Durango, condenó este acto, calificándolo de inaceptable: «El reglamento definitivamente no tiene nada de eso, es totalmente inaceptable la conducta de la directora Hilda Patricia Ortega».
El silencio de las autoridades educativas
A pesar de la creciente preocupación entre los padres de familia, ni la Secretaría de Educación ni la directora del plantel han ofrecido declaraciones oficiales sobre los hechos. Un trabajador de la secundaria informó que la directora estaba ocupada y no podía atender las solicitudes de entrevistas, lo que ha incrementado la frustración entre los afectados.
Ante la falta de respuesta, los padres han solicitado al gobernador Esteban Villegas que aclare los protocolos para el manejo de objetos decomisados a los estudiantes. «Cada institución debe tener su protocolo, pero tampoco quiere decir que uno de ellos sea destruir celulares o quemar objetos», señaló Carlos Ramírez.
Reacciones de los padres de familia
Algunos padres de familia afirman que no fueron informados sobre el destino final de los objetos decomisados, generando desconcierto y molestia. «Pues apenas me estoy informando, no sabía de esto», comentó Marcela Rodríguez, madre de una alumna afectada.
Otros padres, como Nancy Galindo, han pedido que se modifiquen las sanciones disciplinarias de la escuela, considerando excesiva la destrucción de celulares: «Si en el reglamento dice no traer celulares, se debería respetar, pero ya al punto de quemarlos, no está bien».
Multa por iniciar fuego sin autorización
Además de las críticas por la medida disciplinaria, la Dirección de Medio Ambiente impuso una multa a la secundaria por iniciar un fuego sin el consentimiento de Protección Civil, lo que representa una violación a los protocolos de seguridad. Carlos Ramírez expresó su preocupación: «Que valores podemos inculcarle a los niños en una institución donde están viendo actos salvajes como prender fuego sin control».
Los objetos destruidos incluyeron no solo celulares, sino también cosméticos y objetos puntiagudos. La secundaria «José Santos Valdez» enfrenta ahora la multa y el escrutinio público por sus acciones.
Conclusión
El incidente ha puesto en debate las sanciones aplicadas en las instituciones educativas y ha generado una fuerte demanda por parte de los padres para que se revise el reglamento y se implementen medidas más adecuadas para el manejo de objetos decomisados, sin recurrir a la destrucción o la quema.
Fuente: Grupo Es Noticia