El gobierno de Estados Unidos arrancó, de nuevo, su política «Quédate en México», donde se deportaron cerca de 2,000 personas extranjeras a territorio mexicano, esto en coordinación con el gobierno de Claudia Sheinbaum, así lo informó el Departamento del Estado.
«Estados Unidos deportó a 2,000 extranjeros sólo por tierra y aire, ya que se implementó nuevamente la política de Quédate en México. Promesas hechas, promesas cumplidas», compartió Tammy Bruce, vocera del Departamento de Estado de Estados Unidos.
Agregó que cuatro vuelos organizados por la Oficina de Aduanas y Control Migratorio (ICE) aterrizaron exitosamente en México como parte de los esfuerzos de repatriación y devolución de migrantes desde la frontera.
Pese a que Sheinbaum Pardo se negó a recibir migrantes que no fueran mexicanos, Tammy Bruce reiteró que la relación con el gobierno mexicano ha sido «exitosa» para el traspaso de las personas deportadas.
«Los medios falsos ya están mintiendo sobre nuestra exitosa asociación con México para ayudar a que nuestra región vuelva a ser segura. La verdad es que ayer llegaron cuatro vuelos de ICE a México», agregó la vocera del Departamento de Estado.
Ante esto, el gobierno de México intensificó sus brigadas en los nueve centros de atención a repatriados para recibir a las personas deportadas del país vecino. Puso a disposición 189 autobuses para trasladar a los mexicanos hasta estos puntos, donde habrá 125 servidores públicos para ofrecer servicios de reintegración, atención médica, alimentación y estancia.
El Departamento del Interior de Estados Unidos cambió oficialmente el nombre Golfo de México a Golfo de América, así como el de la montaña Denalia de Alaska a Monte McKinley.
“De acuerdo con la reciente orden ejecutiva del presidente Donald J. Trump, el Departamento del Interior se enorgullece en anunciar la implementación de la restauración de nombres que honran el legado de la grandeza estadounidense…el Golfo de México ahora se conocerá oficialmente como Golfo de América y el pico más alto de América del Norte volverá a llevar el nombre de Monte McKinley”, refiere el comunicado.
En el documento se hace referencia a que el Golfo de América “es uno de los recursos más importantes en la historia y economía de Estados Unidos”.
Mientras que el Monte McKinley se alzó como “un monumento a la fuerza y determinación” del presidente William McKinley que condujo a la victoria de la guerra hispanoamericana.
¿Puede Trump cambiar el nombre?
Sí en Estados Unidos, sin ser una decisión unilateral, así que otros países no tienen que seguir dicho cambio.
La Organización Hidrográfica Internacional trabaja para garantizar que todos los mares, océanos y aguas navegables en el mundo, se registren y cartografíen de manera uniforme.
EL pasado jueves Donald Trump, presidente de Estaos Unios realizó una serie de declaraciones sobre México en el Foro Económco Mundial en Davos, Suiza, que al parecer ayudaron a fortalecer el peso.
Aunque endureció las políticas migratorias, catalogó a los cárteles como terroristas y cerró la frontera, Donad Trump aseguró que la relación con México es buena y va progresando, no así con Canadá.
“Con México estamos acordando, creo que vamos muy bien”, afirmó el mandatario en una videollamada durante el evento.
Estas palabras contrastaron con su postura agresiva hacia otros socios comerciales como Canadá, generando confianza en los mercados mexicanos.
De acuerdo con información de Forbes México, el grupo financiero BASE destacó que el peso fue la segunda divisa más apreciada de la jornada gracias a la disminución de temores sobre medidas arancelarias.
“El peso fue hoy la segunda divisa más apreciada, debido a los comentarios del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en Davos”, afirmó Banco Base en un reporte.
El Presidente de Colombia, Gustavo Petro, emuló este domingo la negativa de México de impedir que vuelos con migrantes aterricen en aeropuertos de su país, si las personas deportadas no son tratadas con dignidad.
“Los EE.UU. no pueden tratar como delincuentes a los migrantes colombianos. Desautorizo la entrada de aviones norteamericanos con migrantes colombianos a nuestro territorio. Los EE.UU. deben establecer un protocolo de tratamiento digno a los migrantes antes que los recibamos nosotros”.
Manifestó Petro en un mensaje en su cuenta de X.
Petro no dio detalles de su decisión, pero el anuncio se produce en medio de la polémica que hay en varios países de América Latina por las deportaciones como parte de la política migratoria del presidente estadounidense, Donald Trump.
El Gobierno de Brasil denunció el sábado el uso de esposas por parte de las autoridades estadounidenses contra ciudadanos de ese país durante un vuelo de deportación.
El ministro de Justicia y Seguridad Pública, Ricardo Lewandowski, ordenó a la Policía Federal que pidiera a los agentes estadounidenses la retirada “inmediata” de las esposas, en cuanto el avión hizo una parada técnica en la ciudad de Manaus, según un comunicado.
El viernes, la Casa Blanca indicó que habían “comenzado” las deportaciones de migrantes, en referencia a la principal promesa de campaña de Trump de llevar a cabo la mayor operación de expulsión masiva de extranjeros en la historia de los Estados Unidos.
El mismo día, los primeros dos vuelos de deportación con destino a Guatemala llegaron a ese país procedentes de Laredo (Texas).
Petro ha cuestionado algunas de las decisiones o políticas de Trump, y el pasado martes tachó de “peligroso” el comentario que hizo el inquilino de la Casa Blanca sobre América Latina, región sobre la que el gobernante norteamericano dijo: “No los necesitamos”.
“Hay que esperar el desarrollo de las relaciones y la política en el planeta, no solamente en los Estados Unidos. Pero yo diría que el anuncio de que estamos solos y no nos importa Latinoamérica, etcétera, es un anuncio peligroso no para el mundo solamente, sino para la misma sociedad norteamericana”, expresó Petro a periodistas
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, también aseguró el sábado que Estados Unidos “no sería lo que es” sin los mexicanos que se van a trabajar allá, ante el inicio de las redadas migratorias que iniciaron tras la llegada a la presidencia de Trump.