El paso del huracán Otis por Acapulco ha causado una gran destrucción, y en su rastro, los sobrevivientes buscan con urgencia alimentos en medio de la desolación.
La ciudad costera de Acapulco está en una situación crítica tras el impacto del poderoso huracán Otis. La región se ha sumido en la devastación y el caos.
Con una población de alrededor de 780,000 habitantes, los residentes de Acapulco se enfrentan a una dura realidad en medio de la emergencia. Muchos tuvieron que adquirir agua y alimentos a último momento, mientras que los negocios y viviendas se preparaban para la llegada del huracán, protegiendo sus ventanas con tablones y cinta adhesiva en forma de X.
Las condiciones climáticas extremas llevaron a una ocupación hotelera del 50%, lo que llevó a los representantes del sector turístico a aconsejar a los visitantes que permanezcan en sus hoteles por razones de seguridad.
El huracán Otis, que se esperaba que tocara tierra entre Acapulco y Tecpan de Galeana, sorprendió al llegar antes de lo previsto, generando ráfagas de viento de hasta 270 kilómetros por hora y olas de 8 a 10 metros de altura en las costas de Guerrero y Oaxaca, según el Servicio Meteorológico Nacional.
La ciudad enfrenta un panorama caótico, con una grave falta de servicios esenciales como telefonía, internet, electricidad y transporte público. La mayoría de los comercios, incluyendo las gasolineras, permanecen cerrados.
Llegar a Acapulco ha sido un verdadero desafío, con obstáculos en la Autopista del Sol y pruebas evidentes de la destrucción causada por el huracán. La situación es particularmente angustiante en la carretera de acceso a la ciudad, donde se han reportado saqueos en tiendas de comestibles y supermercados. Algunos habitantes se han visto obligados a buscar alimentos entre la basura, mientras que también se han encontrado cuerpos entre los escombros.
Hasta el momento, se han registrado 27 personas fallecidas y 4 desaparecidas como consecuencia de esta tragedia.
El presidente Obrador hace un llamado a los residentes de las zonas afectadas para que se trasladen a los refugios proporcionados por las autoridades y se mantengan alerta ante posibles peligros. La Protección Civil de Guerrero ha habilitado 631 albergues para dar asistencia a aproximadamente 34 mil familias y ha desplegado un considerable contingente de personal militar y equipamiento de emergencia para brindar apoyo.
A pesar de la devastación causada por el huracán Otis, las autoridades aseguran estar preparadas para afrontar esta crisis, recordando la experiencia del huracán Paulina en 1997, que causó estragos en la misma región.
La situación en Acapulco sigue siendo crítica, con la ciudad sumida en la oscuridad y la incertidumbre, mientras se lleva a cabo una labor ardua de recuperación y ayuda a los afectados por el huracán Otis.
Nuestros pensamientos están con los habitantes de Acapulco y las áreas afectadas por el huracán Otis. Continuaremos actualizando la información a medida que se disponga de nuevos datos sobre la situación en la región.
Fuente: Grupo Es Noticia