Este fin de semana se llevó a cabo la 74 Asamblea Nacional del PRI. Durante el evento se aprobaron cambios en los estatutos del partido, lo que le permitirá a Alejandro Moreno reelegirse en la presidencia del partido hasta el 2032, incluso más tiempo de lo que durará la presidencia de Claudia Sheinbuam.
La reunión fue a puerta cerrada en el Pepsi Center de CDMX. Y fue un evento, marcado por la controversia y las críticas de importantes figuras del partido, como Manlio Fabio Beltrones.
La reunión se desarrolló en medio de un fuerte rechazo interno. Los críticos de Moreno, incluyendo a figuras de peso como Beatriz Paredes y Dulce María Sauri, ya habían expresado su oposición a la reelección del dirigente.
En una carta firmada divulgada esta semana, decenas de militantes exigían la separación del cargo de Moreno, citando la crisis interna del partido.
Moreno y sus seguidores hicieron caso omiso a las demandas de los opositores. La asamblea del PRI, celebrada en su 94 aniversario, se desarrolló con muchos de los críticos esperando afuera, sin poder entrar.
Los pocos que lograron acceder al recinto se sentaron en áreas marginales, lejos del presídium. La tensión aumentó cuando uno de los presentes rompió una puerta de cristal en señal de protesta.
A pesar de los críticos, perduró el apoyo a Alejandro Moreno
El órgano directivo del PRI procedió a leer las enmiendas a los artículos de los estatutos ante la expectación general. A pesar de algunos gritos de “¡no reelección!”, la mayoría de los asistentes, fieles a Moreno, respondieron con gritos de apoyo: “¡Alito, Alito!”. Moreno, tomando el micrófono, descalificó a los críticos, llamándolos “cínicos” y “lacayos al servicio del Gobierno”.
Con estas enmiendas, Alejandro Moreno preparó su camino para controlar el partido por un periodo prolongado.
Sin embargo, mucho apuntan a que bajo su liderazgo, el PRI ha perdido significativamente su poder.
Después de las elecciones del 2 de junio, el partido apenas mantiene el gobierno en dos estados, Durango y Coahuila. Su representación en el Congreso sigue disminuyendo, y la desbandada de militantes ha sido constante.
Moreno incluso ha expulsado a figuras clave, como Alfredo Del Mazo, acusándolos de traición.
La controversia alrededor de la reelección de Alejandro Moreno refleja las profundas divisiones que enfrenta el PRI. Mientras Moreno celebra su consolidación de poder, el partido se encuentra en una encrucijada crítica, con su futuro político en juego.
Fuente: Grupo Es Noticia